La formación de talento y la atracción de talento son dos conceptos clave para el éxito de cualquier organización. No obstante, no todas apuestan por la misma estrategia a la hora de gestionar la contratación de empleados de gran valor y alta cualificación.
Ambos conceptos están estrechamente relacionados, ya que la formación de talento es una de las principales herramientas para la atracción de talento. Los empleados valoran cada vez más las oportunidades de aprendizaje y desarrollo que les ofrece una empresa, y las consideran como un factor determinante a la hora de elegir o permanecer en un puesto de trabajo. Según el informe ‘Learning Workplace Learning Report 2022’ de Linkedin, el 94% de los empleados afirma que se quedaría más tiempo en una empresa que invierte en su formación. Además, este tipo de prácticas contribuye a mejorar la imagen y la reputación de la empresa, lo que la hace más atractiva para los candidatos.
Sin embargo, la formación de talento no sólo beneficia a los empleados, sino también a la organización dado que permite mejorar la productividad, la calidad, la innovación y la competitividad al contar con profesionales más preparados, motivados y comprometidos.
Además, el último informe ‘Future of Jobs 2023’ del World Economic Forum expone que el 60% de las compañías que invierten en cualificar a sus empleados espera un retorno de la inversión en el plazo de un año, aparte de que ayuda a reducir la rotación, el absentismo y el estrés laboral, lo que se traduce en un ahorro de costes y una mejora del clima organizacional.
¿Qué tipo de formaciones nos podemos encontrar hoy en día en las organizaciones? Pues hay quien apuesta por la formación basada en habilidades a través del reskilling o el upskilling que permitan la adaptación a los cambios y desafíos del entorno laboral; los cursos de promoción interna para fomentar el desarrollo y la promoción interna de los empleados; o la posibilidad de ofertar una formación personalizada en función de sus intereses o preferencias.
Asimismo, las organizaciones tienen al alcance de la mano infinidad de herramientas para conocer cuáles son las habilidades que más se adecúan a su cultura o propósito empresarial, de forma que esa información les podrá ayudar a una mejor selección de su personal. Un ejemplo lo pudimos ver en el último webinar organizado junto a PerformanSe.
Por todo ello, la formación de talento y la atracción de talento son dos aspectos fundamentales para el crecimiento y la sostenibilidad de las organizaciones. Para lograrlo, es necesario diseñar e implementar planes de formación adaptados a las necesidades y expectativas de los empleados, así como a los objetivos y valores de la empresa.
También es importante utilizar metodologías y herramientas innovadoras que faciliten el aprendizaje y el desarrollo de los empleados, tales como el e-learning, el microlearning, la gamificación, el coaching o el mentoring. Por último, es imprescindible medir y evaluar el impacto de la formación y la atracción de talento, tanto a nivel individual como organizacional, para identificar las fortalezas y las áreas de mejora.
