En estas fechas previas a la Navidad, son muchos los signos de amistad y confianza que se desarrollan en distintos escenarios de relaciones. Los mensajes, las felicitaciones de Navidad, las redes sociales son algunos de los canales habituales para ello. Pero, entre todas, me quedo con los encuentros de Navidad en los que coincidimos oyentes, seguidores y anunciantes, amigos todos. En estos encuentros, además de tomar algo, tenemos tiempo para hablar y compartir experiencias y especialmente conocernos un poco mejor. Son espacios de relaciones muy efectivas que tenemos que aprovechar para mostrar nuestro mejor yo y hacerlo de forma amistosa, natural y para ganar amigos que si son clientes, mejor que mejor. Tenemos que mostrarnos a los demás y con ello exponer, sin hablar de ello, nuestro producto. Los productos los venden las personas y necesitamos buenos vendedores y buenas personas. Nos compran el mayor de nuestro valor añadido por lo que hace pero siempre antes nos compran nuestro mensaje, nuestra mirada, nuestra convicción, nuestra sinceridad y habilidad, nuestra simpatía y contando, es un acto de confianza con nuestra lealtad.
Son estos momentos los que debemos aprovechar dado que es posible que no tengamos una segunda oportunidad para mostrarnos y ofrecer nuestro producto como es. Enhorabuena a los que cuidan los encuentros en Navidad. A mis clientes y amigos de Recursos Humanos, gracias. Ah! y luego están las cenas de Navidad, pero esta es otra cuestión.
Francisco García Cabello
Fundador y Director del Foro de los recursos Humanos