En la transformación digital, las personas son clave.
Es uno de los grandes retos a afrontar por los responsables de la gestión de Recursos Humanos.
Y es que, la transformación digital por sí sola no es suficiente.
Con la irrupción de las nuevas tecnologías, las personas se convierten en el elemento diferenciador de las organizaciones.
Por este motivo, es importante recordar que la transformación digital solo aportará los resultados esperados si también tiene un impacto positivo sobre la plantilla.
¿Existe escasez de capacidades laborales en el mercado laboral?
Parece que sí, según Deloitte solo el 25% de las organizaciones tiene las personas adecuadas para el futuro.
Las plataformas de formación digital pueden ayudar a los colaboradores a adquirir las nuevas habilidades que requieren estos tiempos.
Por otro lado, a la hora de gestionar la transformación también es relevante digitalizar la cultura.
Tenemos que adaptar la cultura interna para captar el talento joven que nos falta y conseguir retener el talento que está dentro de la compañía.
Y aquí es donde Recursos Humanos juega un papel muy importante, pues debe diseñar itinerarios laborales completamente nuevos y ofrecer a los colaboradores la formación adecuada.
Los profesionales de Recursos Humanos deben centrarse en ayudar al personal a trabajar con las nuevas tecnologías.
¿Cómo abordar la transformación digital del talento?
Las compañías que apuestan por la transformación digital son un 26% más rentables pero, ¿cómo abordan este cambio?
La identificación del talento es fundamental, hay que idear programas que ayuden a encontrar ese talento interno y externo.
Ofrecer una “experiencia digital” a los usuarios atractiva y sencilla es también muy importante.
Hay que aprovechar la tecnología que está cambiando el lugar de trabajo para ofrecer una formación continua e inteligente.
Además, tiene que haber una buena comunicación que ayude a entender el cambio cultural en la organización.
Según Right Management, el 80% de las organizaciones se están suicidando con la transformación digital.
Para evitarlo, tenemos que generar organizaciones líquidas, donde la savia entre en cualquier momento y donde las personas sean más felices.
Las personas, en el centro
Así pues, para afrontar con éxito la transformación digital es necesario que pongamos a las personas en el centro.
Según Brian Solis, analista de Altimeter, hoy más que nunca “la transformación digital es realmente una historia humana”.
El desarrollo de las soft skills, por ejemplo, es clave para minimizar la reticencia del personal a gestionar su propio aprendizaje.
Vamos a tener que mirar dentro, porque fuera, a día de hoy, no existe el talento que buscamos.
No hay gente sin talento en la organización, hay gente mal ubicada.
Por ello, Recursos Humanos debe colocar a las personas en el mejor lugar para su desarrollo profesional.
Del mismo modo, es necesario que los empleados accedan a una formación que les ayude a desarrollar nuevas competencias.
Finalmente, las organizaciones deben contar con las herramientas de evaluación de competencias necesarias.
Los nuevos modelos de evaluación deben estar centrados en el empleado.
De nuevo, tenemos que poner a las personas en el centro del proceso para realizar una buena evaluación del desempeño que nos ayude a atraer y retener el talento.
El factor humano es clave para que la transformación digital sea un éxito, y Recursos Humanos debe encargarse de que así sea.