Este 7 de noviembre se presenta en Madrid el libro de Pablo Romero Cagigal «La conversación de desarrollo», una publicación de Lid Editorial con la que impulsar y fidelizar el talento en las empresas mediante una buena comunicación entre el manager y el empleado.
La cita tendrá lugar en la Universidad Francisco de Vitoria y contará con una mesa redonda moderada por Francisco García Cabello en la que participarán además del autor Tomás Pereda, Subdirector general de Fundación máshumano; Daniel Sada Castaño, Rector de la Francisco de Vitoria; Mercedes Águeda, Vicepresidenta de Recursos Humanos de Capgemini; Jesús Torres, Presidente de la Asociación Española de Directores de Recursos Humanos (AEDRH); Mar Garre, Directora de Personas, Comunicación y Sostenibilidad de Línea Directa Aseguradora; Pedro González, Director General de Desarrollo de Personas en Francisco de Vitoria; y Laura Madrigal; Editorial manager de LID.
En fechas recientes tuvimos la oportunidad de adelantarnos a esta presentación con una entrevista a Pablo Romero Cagigal en el programa Foro Recursos Humanos en Capital Radio en la que nos ofreció algunas pinceladas de lo que vamos a encontrar en «La conversación de desarrollo» y su visión sobre la gestión del talento en las organizaciones.
¿Qué nos has querido contar con «La conversación de desarrollo»?
«Que es un momento de la verdad para la empresa, para el mánager, los colaboradores y todos los empleados. Es una gran oportunidad».
«Posiblemente estamos hablando del principal reto que tienen hoy en día las empresas, que es fidelizar el mejor talento. Yo me imagino una oficina con un boquete enorme y por ahí se está yendo dinero. Y es la gente que se está yendo de nuestras empresas. La rotación del buen talento tiene un impacto económico tremendo».
«Y además estas conversaciones tocan directamente con el compromiso y la motivación de los empleados. Al final es un espacio que tú tienes con tu manager donde se va a hablar de ti. Tú eres el protagonista. Se va a hablar de tus inquietudes, tus problemas, de tus expectativas y por lo tanto no lo podemos ver, como hacen en algunas empresas, como un mero trámite. De poner el tick de ya está hecho. Es un momento muy importante que hay que cuidar mucho y que hay que estar preparado para ello».
¿No se hacen conversaciones de desarrollo o no se hacen del todo bien?
«Las dos cosas. En muchas empresas no se hacen y en muchas empresas se hacen mal. Es verdad que hoy vivimos posiblemente el momento de más exigencia a nivel de las organizaciones. Yo esto lo detecto en las formaciones o cuando acompaño a equipos. La gente no llega bien, es una realidad. Es muy difícil atender todos los frentes. Y posiblemente lo que está pasando es que se desplaza un tema importante como estar cerca de los colaboradores, de acompañarles en su crecimiento, de escucharles, por temas que son muy urgentes pero que no son más importantes».
«El rol del manager tiene muchas aristas, pero desde mi punto de vista el tener bien atendido a tu equipo es la más importante«.
¿Qué barreras hay para no hacer una buena conversación de desarrollo?
«Cuando no hay confianza es muy difícil tener buenas conversaciones de desarrollo. A estas conversaciones, tanto el colaborador como el manager tienen que ir sin coraza. No es una pose. Tenemos que ir con nuestra vulnerabilidad, que es el punto de partida del crecimiento. Reconocer que somos, con muchísimo potencial por supuesto, pero somos limitados como seres humanos y tenemos siempre margen de mejora. Y esto aplica tanto al colaborador como al mánager».
«La conversación de desarrollo es una muy buena oportunidad para que el manager identifique cómo puede ayudar más a esa persona que trabaja con él».
