La 2ª Jornada Precongresual celebrada en Santa Cruz de Tenerife en el marco del 23 Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria (23CNH), que se celebrará en Las Palmas de Gran Canaria, entre los días 8 y 10 de marzo, ha concluido con un balance muy positivo al abordar cuestiones de utilidad con el objetivo puesto en la mejora de la calidad del ámbito asistencial. En este espacio de diálogo abierto se han puesto sobre la mesa las principales líneas de actuación y estrategias que habría que aplicar para lograr una mayor calidad y adecuación del sistema sanitario a las demandas de la sociedad actual.
La Sociedad Española de Directivos de Salud (SEDISA) y la Asociación Nacional de Directivos de Enfermería (ANDE), organizaciones impulsoras de 23CNH, han destacado el valor de estas jornadas celebradas en la capital tinerfeña, que han reunido a expertos de diferentes áreas de la salud tanto de las Islas Canarias como procedentes del resto del territorio nacional. Los presidentes de ambas entidades, José Soto y Jesús Sanz, respectivamente, resaltaron el papel de Ignacio López como coordinador de esta 2ª Jornada Precongresual, centrada en las reformas que precisa en el sistema sanitario, así como en los nuevos roles de los profesionales y pacientes y en otros factores que actúan como determinantes de la salud de las personas.
La jornada, celebrada en Santa Cruz de Tenerife los pasados días 26 y 27 de enero contó, en su sesión del viernes, con la presencia de la diputada y exministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, formando parte de una de las mesas en las que se ha dividido este encuentro profesional, antesala del Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria.
En una jornada desarrollada bajo el título “El futuro está aquí”, en la primera mesa del viernes se presentaron varios informes sobre la situación de la Sanidad en España que coinciden en la necesidad de actuar ya para afrontar los retos que plantea un entorno de cambios constantes. Bajo el título ‘Propuestas de Reforma del SNS. ¿Si estamos de acuerdo por qué no avanzamos?’ se presentaron las conclusiones de tres estudios que ponen de manifiesto tanto las necesidades del sistema como la forma en la que podrían superarse sus carencias. Una mesa que fue moderada por la directora gerente del Complejo Hospitalario Universitario de Canarias, Mercedes Cueto, quien afirmó al término de las ponencias que hay medidas que dependen directamente de los profesionales de la gestión sanitaria, pero es necesario que haya voluntad política para avanzar en la transformación del modelo.
El gerente del Área Sanitaria Integrada de La Coruña, Luis Verde, presentó los resultados del informe AMPHOS, un proyecto impulsado desde SEDISA, dedicado a ‘La asistencia sanitaria que queremos en 2025’. Un trabajo realizado por un gran número de profesionales, contando con la participación de pacientes, que identifica los problemas de la prestación asistencial y aporta líneas de actuación para dar respuesta a los mismos.
El consultor sanitario de Roland Berger, Ignacio Riesgo, en su ponencia ‘Consenso por un Sistema Sanitario del Siglo XXI’, también hizo referencia a un informe reciente en el que se pone de manifiesto que, pese a la tradición reformista existente en España en materia sanitaria, también hay resistencias. Riesgo apuntó que los sistemas sanitarios han sufrido mucho tras la aparición de la covid-19, afectando a todos los países de manera global, y señaló que la reforma de los años 80 obvió la reforma del modelo de gestión y el régimen de personal, dos cuestiones que han de ser resueltas porque están generando problemas para profesionales y pacientes.
A continuación, la directora gerente del Hospital Universitario del Sureste, Arganda del Rey, en Madrid, Paloma Casado, miembro del Comité Científico de la Fundación Economía y Salud, expuso las conclusiones del trabajo denominado ‘106 medidas que mejoran la sanidad en España’. Informe iniciado en 2017 y actualizado con la pandemia, en el que han participado expertos de once Comunidades Autónomas con el objetivo de mejorar el sistema sanitario. El texto recoge diferentes medidas que pueden servir a los decisores, siendo también una guía para la autoevaluación de las organizaciones. En él se plantea la generación de salud fuera de los hospitales y de los centros de salud, lo que se denomina “organizaciones sanitarias líquidas”, concepto en el que no basta con combatir la enfermedad, sino en trabajar en la salud, verdadero paradigma de la transformación del sistema.
La segunda mesa de la jornada estuvo moderada por el gerente de Atención Primaria del Área de Salud de Tenerife, José Miguel Rodríguez, abordándose en ella los ‘Nuevos roles ante nuevos retos’. Iniciada con la intervención del vicepresidente de la Asociación Española contra el Cáncer de la Junta Provincial de Santa Cruz de Tenerife, David José Cova, con su exposición ‘¿Voluntarios o Necesarios?’, para quien desde el sistema sanitario se deben generar alianzas con las asociaciones de ayuda al paciente.
Por su parte, la exministra María Luisa Carcedo habló en base a la premisa ‘El Hospital ante los nuevos desafíos para el Sistema Nacional de Salud’, y en este contexto hizo referencia a la capacidad de este foro en Tenerife para debatir acerca de la mejora del sistema sanitario. En su intervención destacó como uno de los principales desafíos del SNS la incorporación de terapias avanzadas sin que se produzcan inequidades y que, aunque estamos por debajo de la media europea en inversión, los resultados en España son muy positivos desde el punto de vista de la equidad. Asimismo, lanzó como propuesta la reorganización de los servicios pensando en el ciudadano, no en los profesionales.
El coordinador de la Unidad de Gestión del Conocimiento del Hospital Universitario de Nuestra Señora de la Candelaria, Oscar Rey, abordó el papel de los profesionales de la Enfermería, desde dar una respuesta al envejecimiento poblacional, la necesidad de plazas sociosanitarias, la atención a crónicos y afrontar temas como la pobreza y la salud mental, así como estrategias de prevención y promoción de la salud por parte de todos los agentes. Rey apuntó como otro de los retos a la digitalización y su utilidad para mejorar la calidad de vida de los pacientes, haciendo especial énfasis en el uso del big data y la inteligencia artificial para la interoperabilidad de los sistemas. Apeló, además, al cuidado del clima laboral, con un profesional sano, motivado y con un buen sistema de contratación.
Para finalizar se trataron bajo el punto ‘Otros determinantes de la Salud’ diferentes aspectos que condicionan la salud de las personas, como la organización de los espacios de forma saludable y la salud mental. Esta mesa se abría con las palabras de la moderadora y gerente del Complejo Hospitalario Nuestra Señora de Candelaria, Natacha Sujanani, quien hizo una introducción en esta sesión transversal acerca de la importancia de procurar entornos en los que la persona pueda desarrollarse en plenitud y vivir en armonía con ellos.
A este respecto, la arquitecta y fundadora del proyecto Gurimo, Guayarmina Rijo, reflexionó sobre la importancia de la arquitectura como herramienta de salud. La tendencia en la configuración de espacios debe atender a la comodidad del ser humano, con buenos diseños y sin factores de riesgo como la falta de luz, humedades, falta de aislamiento y la incorporación de elementos no contaminantes. En definitiva, lugares por donde se pueda caminar, con presencia de la naturaleza, espacios de encuentro y donde la infancia tenga su lugar.
En esta misma línea, el jefe de Servicio de Medicina Interna del Hospital Quirónsalud de Tenerife, José Alejandro Medina, en su presentación ‘Ciudades saludables: reflexión de internista ecléctico’ subrayó la importancia de la educación en la creación de ciudades sostenibles. Estas ciudades deben tener en cuenta el tipo de patologías más habituales para dar respuesta a las necesidades de una parte importante de la población.
Por último, la ponencia ‘Abordaje de la Salud Mental en la Comunidad’ de la subdirectora de Enfermería del Área Externa del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, Verónica Suárez, hizo un repaso histórico para saber de dónde se partía en la isla en esta materia y poder así visualizar los avances experimentados. Según la OMS, una de cada cuatro personas padece una enfermedad mental, un 1% de la población desarrollará alguna forma de esquizofrenia a lo largo de su vida y la esperanza de vida de personas con TMG es 15 años menor que en la población general. lo que requiere de coordinación entre la red asistencial y los servicios sanitarios. Para concluir, Suárez recordó que el modelo actual de atención a la patología mental se asienta sobre la recuperación del proyecto vital una vez aparecida la enfermedad y no simplemente en la recuperación del trastorno, siendo necesario para ello espacios que fomenten la integración de las personas afectadas por este tipo de enfermedad.
