La semana pasada hablamos en exclusiva con el doctor Francisco Reinoso, jefe del servicio de Anestesiología y Reanimación Infantil del Hospital de La Paz, para conocer cómo está la situación en este centro hospitalario a raíz de la reincorporación por orden judicial del doctor Pedro de la Oliva como jefe de la UCI de Pediatría y la baja o renuncia del resto de facultativos de la unidad.
En el trasfondo de este asunto están unas acusaciones de supuesto acoso laboral que colean desde 2020 y que motivaron el cese del jefe de servicio y que desde los tribunales no han sido atendidas, por lo que hasta en dos ocasiones ha tenido que ser readmitido en su puesto.
¿Cómo está la situación en estos momentos?
«Actualmente no hay ingresados pacientes en la Unidad de Cuidados Intensivos pediátricos porque no había facultativos que los pudiesen atender. Y han sido trasladados a nuestra Unidad de Cuidados Críticos y Reanimación, que depende del servicio de Anestesiología, donde están siendo igualmente tratados y cuidados».
«Pero con la consecuencia de que están ocupando unas camas que estaban destinadas a pacientes que tenían que ser operados y luego ingresados en estas unidades de cuidados críticos. Y todo esto está provocando una sobrecarga en el servicio y en el funcionamiento, con cancelación de intervenciones».
¿Ha habido casos que se deriven por alguna situación de urgencia?
«Lo que son pacientes como tal, que tengan que venir a urgencias de La Paz y que puedan necesitar cuidados intensivos, estamos intentando evitar este tipo de traslados dado que actualmente las camas de cuidados intensivos y de críticos en el hospital obviamente se han visto disminuidas».
«Con lo cual, patología que habitualmente venía a este hospital, y que luego o antes iba a necesitar cuidados críticos o intensivos, está siendo derivada a otros hospitales».
¿Cuál es la situación con este médico y de todo el colectivo?
«Sin juzgar la cuestión de fondo judicial que pueda haber en ello, y la razón o no que pueda tener la sentencia judicial, que desde luego no analizamos porque no somos juristas, lo que no entendemos son las consecuencias asistenciales tan nefastas que ha tenido la aplicación de dicha sentencia«.
«Independientemente en entrar en juicios de valoración acerca de la persona y la capacidad del doctor De la Oliva, un hospital puntero como es el Hospital La Paz, lo que necesita son equipos humanos que sepan trabajar en equipo. El principal capital humano que tiene el Hospital La Paz, independientemente de la dotación tecnológica, de los nuevos adelantos (…) es la calidad y competencia de los médicos que trabajan en él».
«Del personal sanitario en general, formando equipos. Y para formar equipos hay que saber liderar estos equipos, no de un modo autoritario, sino de un modo basado en la autoridad científica, moral, de dar ejemplo, etc. Cuando algo falla y un equipo no funciona tenemos que analizar, y la Gerencia lo hace, cuáles son los motivos de que esto no sea así y luego tomar la mejor solución».
¿Qué mensaje se puede lanzar a pacientes y familiares?
«Tranquilizar por supuesto a todos los familiares y a todas las personas que puedan tener un paciente pediátrico actualmente ingresado en el Hospital. Está asegurada la asistencia de calidad. En ese sentido que no se sientan en absoluto concernidos por ningún tipo de preocupación».
«Por la cualificación es frecuente que haya traslados entre ambas unidades. Dependiendo de las épocas asistenciales de bronquiolitis intercambiamos pacientes».
«La única preocupación es la escasez de camas. Lo que nos obliga a ser más selectivos a la hora de aceptar pacientes en el hospital que puedan necesitar este tipo de camas en cuidados intensivos y cuidados críticos».
¿Puede tener este asunto una solución rápida?
«La solución es exclusivamente judicial. La sentencia es judicial y solamente el poder judicial puede decidir hasta qué punto se debe aplicar esta sentencia. Que como digo desde el punto de vista formal, en cuanto a su adecuación, no tenemos ninguna duda de que es la que tiene que ser».
«Tenemos muchas dudas en cuanto a sus consecuencias. Creo que alguna instancia judicial competente debería valorar si la aplicación de una sentencia, seguramente justa, puede comprometer como efecto secundario, como efecto no buscado, la salud y la atención a los pacientes«.
«El sistema judicial español seguro debe tener recursos para solucionar esto. Sobre la velocidad del sistema judicial español ya no tengo elementos de juicio».
¿Van a seguir las reivindicaciones de los médicos?
«Sin duda. Esto no es una situación en absoluto inocua ni baladí. Las consecuencias que tiene son muchas, aunque las podamos estar compensando. Y desde luego es nuestra obligación ética y moral el seguir luchando o intentar conseguir la mejor asistencia para nuestros pacientes también en este campo».
Escucha la entrevista al completo al doctor Reinoso, jefe del servicio de Anestesiología y Reanimación Infantil del Hospital de La Paz: