Affor ha elaborado un informe a raíz del estudio ‘Impacto del Covid-19 en la salud psicológica de los trabajadores en España’.
Concretamente, el informe de Affor ahonda en el estado psicológico de los profesionales docentes de cara al regreso a las aulas, así como la prevención de los riesgos psicosociales durante y tras la pandemia.
La muestra tiene en cuenta a más de 400 profesionales de la educación entre los meses de abril y junio.
El estudio de Affor se ha realizado paralelamente en España y en siete países de Latinoamérica (Argentina, Colombia, Chile, Ecuador, México, Panamá y Perú).
También ha contado con la colaboración de partners en destino, así como con Foro de Recursos Humanos, la Cátedra de Prevención de la Universidad de Sevilla, PRL Innovación y DCH – Organización Internacional de Directivos de Capital Humano.
Según Affor, más de la mitad de los docentes, un 54%, presenta síntomas de ansiedad. Entre los principales indicios que manifiestan, destacan:
- Alteración del sueño (90%),
- Nerviosismo, irritabilidad o tensión (89,5%)
- Dolor de cabeza (79,2%)
- Retraso en el comienzo de las tareas (62,9%)
- Sensación de ahogo sin esfuerzo físico (52,1%)
El impacto del Covid-19 ha provocado desajustes de carácter psicológico en muchas personas, sobre todo entre la población activa a la hora de compatibilizar vida profesional y familiar en un entorno novedoso para todos.
Esto se une que el sector educativo es tradicionalmente uno de los más expuestos a la ansiedad y que más se ha visto afectado desde el inicio de la pandemia.
«Con el inicio del curso escolar las consejerías de educación y los centros educativos deberían reforzar el seguimiento de los riesgos psicosociales entre los profesores para evitar que su incidencia aumente”, considera Carmen Rodríguez, directora del área de Intervención Psicológica de Affor.
El informe de Affor destaca también que el 64,6% de los docentes se siente agobiado y en tensión, un síntoma que identifican como más frecuente de lo habitual.
- El 55,2% presenta pérdida de sueño por preocupaciones
- El 58,7% no se concentra
- Un 42,7% se siente poco feliz y deprimido.
Atendiendo a la escala de Goldberg, el estudio refleja que el 71,33% de los profesores encuestados requeriría realizar una valoración detallada desde el área de salud ocupacional por posible ansiedad y depresión.
Algo que se debe efectuar siguiendo los criterios recogidos en el Protocolo PSICOVS2012 publicado por Osalan – Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales, según Affor.
“La educación es fundamental para construir sociedades más prósperas. Por eso, es necesario que las administraciones públicas y los centros educativos implanten medidas para que puedan enseñar a los alumnos sin sufrir desgaste psicológico«, afirma Anabel Fernández, CEO de Affor
De ese modo, «se pueden prevenir los riesgos psicosociales y posibles situaciones de ansiedad y estrés ante regreso a las aulas en un curso marcado por la incertidumbre”, añade.