Desde que el pasado mes de noviembre se anunciara la disponibilidad de ChatGPT, la Inteligencia Artificial se ha colado en la agenda de las conversaciones de todas las empresas.
Aunque muchas organizaciones llevan años utilizando herramientas y tecnologías relacionadas con la Inteligencia Artificial, los avances más recientes en automatización han transformado la manera en la que se utiliza la tecnología tanto en el ámbito personal como en el profesional.
Desde el punto de vista laboral, uno de los mayores temores que ha provocado la Inteligencia Artificial es la desaparición de cientos de puestos de trabajo; estos días, de hecho, se suceden las huelgas en Hollywood debido a las amenazas que sienten guionistas y actores con esta tecnología; y es muy probable que otros puestos de trabajo intensivos en mano de obra pero poco cualificados, como operadores de líneas de ensamblaje, cajeros en supermercados, analistas básicos o incluso conductores de camiones puedan desaparecer debido a la automatización.
En el caso de España, un informe de la OCDE sobre Perspectivas de Empleo revela que el 28 % de los empleos se encuentra en alto riesgo de ser automatizados con tecnologías relacionadas con la IA. Por el contrario, hasta 3 de cada 4 profesionales en el ámbito de la manufactura o los servicios financieros han visto aumentado su ritmo de trabajo desde que sus organizaciones han implantado tecnologías de automatización.
Por ello, la consultora de desarrollo digital española Syntonize ha recopilado algunas de las nuevas profesiones que pueden surgir a partir del de desarrollo de la IA y de la apuesta por tecnologías de automatización que reenfocan las tareas de los profesionales hacia actividades más creativas:
- Científico de datos: la IA permite analizar millones de datos, pero para sacar conclusiones que permitan tomar decisiones inteligentes es necesario filtrar y extraer la información útil y conocer qué técnicas estadísticas y matemáticas aplicar para interpretar correctamente las conclusiones. Algunas universidades españolas ya ofrecen estudios de Business Data Analytics, para cuyos egresados se esperan niveles de empleo muy altos.
- Arquitectura de IA: de la misma manera que ya hay programadores de software o desarrolladores de aplicaciones, es necesario contar con expertos en construcción de arquitecturas basadas en Inteligencia Artificial. Sus responsabilidades se basan en el desarrollo de código eficaz para que la IA dé respuesta a los desafíos del negocio cumpliendo no solo con los requisitos legales sino también éticos imprescindibles, por lo que una formación exclusivamente basada en tecnología no será suficiente, sino que los conocimientos en psicología o filosofía aplicada son fundamentales también.
- Experiencia de usuario: estas técnicas ya se aplican al desarrollo de páginas web y de aplicaciones móviles, pero la IA abre una nueva puerta llena de oportunidades y de retos. De la misma manera, la IA puede analizar y detectar conflictos en el código y predecir vulnerabilidades con el objetivo de evitar problemas y alcanzar experiencias de uso eficientes.
- Ingenieros especializados en Machine Learning: estos profesionales son los que se encargan de desarrollar los programas basados en algoritmos de automatización, los entrenamientos de la IA y la mejora de los modelos. Además, al analizar grandes volúmenes de datos, la IA puede ofrecer recomendaciones sobre los enfoques de diseño y recomendaciones sobre la selección de algoritmos y las mejores prácticas de codificación. Los sistemas de IA pueden aprender de patrones y ejemplos históricos, lo que ayuda también a los programadores a tomar decisiones más informadas y eficientes durante el desarrollo de software.
«Aunque siempre se habla de los puestos de trabajo que pueden desaparecer debido al desarrollo de la Inteligencia Artificial, las oportunidades que se abren son inmensas y las profesiones relacionadas con esta tecnología pueden reforzar también aquellos trabajos en los que la interacción humana o la toma de decisiones muy complejas y las habilidades creativas siguen siendo muy valoradas», apunta Juan Quintanilla, CEO de Syntonize.
