La reunión mantenida este lunes entre el Ministerio de Trabajo, patronal y sindicatos para subir el salario mínimo interprofesional (SMI), la tercera desde que comenzaran las negociaciones, ha terminado sin acuerdo para lograr un aumento del 4% tal y como plantea el Gobierno. Un porcentaje que los sindicatos consideran insuficiente y que los empresarios miran con recelo.
En la rueda de prensa posterior, Joaquín Pérez Rey, secretario de Estado de Trabajo y Economía Social, ha señalado que a final de esta semana volverá a haber un nuevo encuentro entre el Ejecutivo y los agentes sociales, una cita en la que debe salir un acuerdo.
Antes de la entrada a la reunión, Pérez Rey advertía ante lo medios de que «si no alcanzáramos un acuerdo entorno a la cifra del 4%, si la patronal española no se alineara a suscribir un acuerdo con el Gobierno, naturalmente el Gobierno se desvincula de esa cifra, buscará un acuerdo bipartito, como ya ha hecho en otras ocasiones, e intentará acordar con los sindicatos una subida del SMI que, obviamente, no podrá estar ya en el 4%, estamos dispuestos por tanto a hacer una subida más ambiciosa«. Por ahora la CEOE no ha querido hacer ninguna valoración al respecto.
Por parte de los sindicatos, Mari Cruz Vicente, secretaria confederal de Acción Sindical de CC.OO. y que estuvo en Foro Recursos Humanos el pasado 18 de diciembre comentando el estado de las negociaciones, ha reconocido que el encuentro se ha cerrado «sin mucho éxito»: «No ha habido ninguna variación en las propuestas, ni por parte de los sindicatos, ni por parte del Gobierno. Los empresarios se han comprometido a estudiar las propuestas que hay encima de la mesa y darán una contestación en la próxima reunión, que será o bien el jueves o bien el viernes de esta misma semana«.
El vicesecretario general de política social de UGT, Fernando Luján, manifestaba que «no me parece coherente que haya unos parámetros inferiores para el salario mínimo respecto al resto de retribuciones mínimas que se perciben y que se han fijado por parte del Estado».
No obstante, los representantes sindicales se han mostrado favorables a que se pueda alcanzar finalmente un acuerdo con los empresarios.
Desde su cuenta de «X», la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha señalado que «la subida del SMI es la mejor herramienta contra la desigualdad. Lo hemos subido un 50% pero no nos conformamos. Hay que reducir el diferencial de 25 puntos respecto a los salarios europeos. Esta va a ser la legislatura de los salarios y de la reducción de la jornada laboral«.