Randstad, empresa líder en soluciones de recursos humanos en España, ha analizado la situación laboral de los profesionales que se inscriben como demandantes de empleo a pesar de tener ya un puesto de trabajo. Actualmente en España hay 898.133 demandantes de empleo que cuentan con trabajo actualmente, independientemente de su formación académica. El peso de este grupo ha aumentado en el mercado laboral durante el último año (16,4% frente a 15,6%).
Lo que destaca de este grupo es que a mayor nivel formativo, más intención de buscar un nuevo empleo. Es decir, el volumen de trabajadores que rastrean el mercado laboral en busca de nuevas oportunidades es mayor cuanto más elevada es su formación académica. En este sentido, el 15% de los demandantes de empleo que cuentan con educación primaria están ocupados, el 16,3% con educación secundaria y el 18,7% conformación postsecundaria. Cabe recordar que los trabajadores con una formación superior son los que han encontrado empleo con más facilidad durante los años de crisis, aunque en algunos casos se ha dado una sobrecualificación de los trabajadores, lo que podría provocar este interés por cambiar de empleo a otro más acorde a sus expectativas, formación o experiencia.
Por regiones, el informe de Randstad revela que Euskadi es la comunidad autónoma con un porcentaje más elevado de trabajadores que buscan un empleo aunque están actualmente trabajando, ya que éstos representan el 34,8%. A continuación se sitúan las comunidades de Aragón, Murcia, Baleares y Navarra, todas ellas con una tasa por encima del 20%, frente al 16,4% de la media nacional. En la parte inferior de este ranking se encuentran Canarias, Galicia y Castilla-La Mancha, con ratios por debajo del 12%.
Por provincias, Guipúzcoa, Álava y Vizcaya copan los tres primeros puestos. En todas ellas, uno de cada tres demandantes de empleo tiene trabajo actualmente. Huelva y Jaén se sitúan entre el 25% y el 27%. El resto de regiones que superan el 20% son Teruel, Almería, Castellón, Huesca, Córdoba y Zaragoza. En el lado opuesto, las provincias con menores tasas de demandantes de empleo ocupados son Toledo, Ciudad Real, Las Palmas y Ourense, todas por debajo del 11%.