Yolanda Díaz ha anunciado que el próximo jueves 25 de enero arrancará la mesa de diálogo social con patronal y sindicatos para abordar la reducción de jornada. Se trata de la segunda gran medida en la que está trabajando el Ministerio de Trabajo y Economía Social después de la subida del salario mínimo interprofesional (SMI).
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo ha aprovechado el acto de firma del acuerdo junto a CCOO y UGT de la subida del 5% del SMI para anunciar una reunión el próximo jueves 25 en la que empezar a trabajar en la reducción de la jornada laboral, otra de las medidas del pacto de gobierno ‘España Avanza’.
En dicho documento se establece reducir la jornada laboral desde las 40 horas semanales actuales a 38,5 horas en 2024 y a 37,5 horas en 2025. Todo ello sin que se produzca una descenso en los salarios, tal y como ha explicado Díaz: «Vamos a reducir la jornada laboral que lleva congelada 40 años en nuestro país, pero sin reducción salarial, porque esto es lo que va a hacer que sigamos subiendo los salarios en nuestro país».
La vicepresidenta también ha señalado que el objetivo durante esta legislatura es poder tener «un modelo de relaciones laborales que mejore la productividad«. «Vamos a seguir luchando por la ampliación de los derechos laborales y sociales», ha destacado.
Según informa «Infobae», el Ministerio de Trabajo también tiene pensado modificar el registro de la jornada laboral implantado en 2019 para que sea más efectivo y garantice «el cumplimiento de los límites en materia de jornada», tal y como demanda UGT. El sindicato ha denunciado este asunto ante el Comité Europeo de Derechos Sociales debido a que con el actual sistema no se realiza un control exhaustivo de horas y se acaba trabajando más de lo que estipula la ley.
Subida del SMI
Respecto al acuerdo para el aumento del salario mínimo interprofesional, durante el acto de la forma Díaz ha defendido que «nadie que trabaje a jornada completa en España puede cobrar menos de 1.134 euros mensuales en 14 pagas, lo que equivale a un salario medio anual de 15.876 euros».
Pepe Álvarez, secretario general de CCOO, ha asegurado que «es muy importante que el SMI sea un soporte permanente a la acción de la negociación colectiva« y ha pedido que se regule por ley «hasta qué punto es necesario que, de manera automática, los salarios más bajos de convenio afectados por el SMI puedan sumar ese aumento en las propias escalas salariales».
Desde UGT, su secretario general Unai Sordo ha celebrado que «la subida de los salarios puede impulsar la mejora de la productividad de la economía porque si se suben los salarios y sobre todo los salarios más bajos se favorecen los mejores proyectos empresariales y se desincentivan los peores proyectos empresariales».