La apuesta por los mayores parece que poco a poco se va convirtiendo en una realidad. El talento senior vuelve a ocupar el puesto que se merece en la alta dirección de nuestros organizaciones. Al menos, es lo que se desprende de un estudio elaborado por Alliance Partnership International (API).
Según este grupo internacional de firmas consultoras independientes de búsqueda de ejecutivos, la media europea de contrataciones de cargos directivos mayores de 50 se sitúa en torno al 13%. Por otro lado, en países de Latinoamérica como Chile, Brasil o Argentina la cifra se sitúa por debajo del 13%.
Sin embargo, cuando hablamos de España, esta cifra asciende al 37%, de forma que casi triplicamos la contratación de mayores de 50 años respecto a nuestros países vecinos.
“Aunque tenemos la percepción que la oferta de puestos de trabajo para profesionales mayores de 50 años es difícil, nuestra experiencia demuestra lo contrario. Los empleadores valoran esta franja de edad por varios motivos: a partir de los 50 tienen pocos condicionantes familiares, plena salud y entusiasmo para con el trabajo, su experiencia y conocimientos son un claro valor añadido y su agenda de contactos ofrece las mejores oportunidades de networking”, explica Santiago Tarín, presidente de Alliance Partnership International.
“La contratación de profesionales con puestos de responsabilidad en departamentos técnicos suele estar copada por perfiles más jóvenes, en cambio, en los perfiles de alta dirección en los que se requiere experiencia en la gestión de las personas –las llamadas soft skills- suele valorarse los profesionales más seniors. Es decir, en mi opinión, la diferencia del porcentaje no está determinado por el país sino por el tipo de empresa y por la posición para los que se busca un puesto profesional”, añade Tarín.