Willis Towers Watson, empresa líder en consultoría global, broking y soluciones, ha celebrado recientemente la jornada “Arquitectura de puestos y Compensation Software”, donde más de un centenar de responsables de RRHH pudieron averiguar cómo nivelar correctamente los puestos para mejorar la productividad de una organización.
Para lograr esto, Willis Towers Watson presentó la metodología Global Grading System (GGS), la cual busca determinar el valor relativo de cada puesto en base a la contribución que realiza a la organización. Esta filosofía entiende que el empleado no solo realiza un trabajo, sino que desarrolla todo su talento dentro de una organización que es la responsable de establecer qué se debe hacer tanto a nivel externo como interno.
Se trata de “un método estándar que permite valorar los puestos de forma objetiva y aplicarlo a nivel global, pues se adapta a las necesidades de cada organización”, explicó Berta Pérez, Senior Rewards Manager – Job Levelling Champion de Willis Towers Watson, quien recordó que GGS “es la primera metodología que ofrece autonomía a los responsables de recursos humanos de una compañía con respecto de los consultores de Willis Towers Watson”.
La metodología GGS se divide en tres fases:
- Definición del negocio (tamaño, localización geográfica y servicios/productos que ofrece).
- Determinación de la banda (si es una carrera de contribución individual o de gestión de equipos).
- Graduación del puesto (mide 7 factores entre los que destacan la necesidad de contar con conocimientos técnicos y de negocio, potenciales exigencias de liderazgo o habilidades interpersonales).
Se trata de una arquitectura que “permite a las empresas conocer cuáles son realmente sus necesidades, hacia dónde deben dirigir sus esfuerzos, así como diseñar sus políticas de compensación y retención del talento en base a esa información”, comentó Eva Patier, Directora de Talent & Rewards de Willis Towers Watson. Gracias a ello, “las organizaciones minimizan los costes y aumentan la productividad de sus empleados con la correspondiente mejora en su cuenta de resultados anual”.
El encuentro puso de manifiesto que “las compañías deben adaptarse a los cambios que se han experimentado en el campo de los recursos humanos ya que, de no hacerlo, a medio plazo terminará por afectar a su productividad y capacidad de competir con empresas análogas del sector”.