El envejecimiento de la población plantea diversos desafíos a nivel laboral, según un estudio del Centro Común de Investigación, que ha llevado a plantear a la Unión Europea que el número de trabajadores sanitarios deberá crecer hasta 2030 en 11 millones de empleos.
Los cambios demográficos acaecidos en el UE y su impacto en la demanda de sanidad y cuidados de larga duración apuntan como causas de este crecimiento de contrataciones de trabajadores sanitarios.
La mayoría de estos puestos cubrirán la salida de los trabajadores actuales, por su jubilación. Si bien una parte menor derivará de cambios en la estructura de estos sectores.
Como señala iSanidad la UE deberá encontrar 3,9 millones de personas para cubrir vacantes de sanitarios como doctores, enfermeros o veterinarios, 3,2 millones de trabajadores sanitarios «asociados», es decir, técnicos de farmacia o enfermería, y otros 3,8 millones de empleos relacionados con los cuidados.
El informe propone poner en marcha instrumentos para fomentar la migración laboral y atraer a sanitarios y trabajadores de cuidados de larga duración a las Unión Europea.
Además propone abordar los procedimientos exigidos hoy en día para que una formación adquirida fuera del bloque de la UE sea reconocida.
En relación con los trabajadores de cuidados apunta el Centro Común de Investigación que normalmente no se exige formación específica y las tareas a realizar requieren habilidad informales, que no pueden evaluarse.
Si no hay herramientas específicas para su análisis puede desincentivar la contratación.
Finalmente apunta que los programas internacionales para contratar trabajadores sanitarios y personal de cuidados tienen limites en cuanto a número y alcance.