Siemens, compañía global líder en tecnología, reafirma su compromiso con la diversidad anunciando la firma de tres acuerdos dirigidos a fomentar la igualdad y el respeto entre sus colaboradores, así como en la sociedad en su conjunto.
La compañía ha renovado su alianza con la Fundación Diversidad, como firmante del “Charter de la Diversidad”, para el periodo 2015-2017. Se trata de un código de compromiso al que se adhieren voluntariamente empresas e instituciones para fomentar principios como la igualdad, el respeto o la inclusión de todas las personas, independientemente de sus perfiles, en los ámbitos laboral y social. El sello reconoce los beneficios que la diversidad brinda a las organizaciones e impulsa políticas concretas que promuevan un entorno libre de prejuicios en materia de empleo, formación y promoción. A través de este pacto, Siemens continúa su apuesta por una plantilla plural que fomenta el respeto y la no discriminación, al tiempo que difunde esta responsabilidad entre sus empleados y clientes.
En los últimos años, los colaboradores con discapacidad en la plantilla de Siemens han ido en aumento y, a través de acuerdos adicionales, la compañía colabora en esta inclusión de forma activa. Muestra de ello es la creación de un “enclave laboral” en su fábrica de Cornellá (se trata de un contrato temporal suscrito entre la compañía y el centro especial de empleo al que pertenece la persona con discapacidad). En este espacio, un total de 9 personas con discapacidad se dedicarán, a través de un acuerdo de 3 años de duración, a labores de encintado de bobinas en maquinaria y equipamiento ferroviario.
Por otro lado, Siemens ha adjudicado a los centros especiales de empleo APTA y Sekurlan XXI contratos para el suministro de vestuario técnico y de trabajo; así como de equipos de protección individual (EPIs) respectivamente. Como empresas socialmente responsables y especialmente sensibles a la integración, ambos centros generan empleo de forma sostenible para personas con discapacidad.
Siemens está convencida de que la diversidad no es una moda, sino una necesidad de las empresas para adaptarse al cambio, ser más competitivas y garantizar su sostenibilidad en el siglo XXI. Por ello, la compañía contempla la diversidad como un desafío, pero también como una oportunidad para aportar diferentes puntos de vista, sensibilidades y tendencias. Esto se traduce en una mejor preparación para afrontar los nuevos retos sociales, económicos y empresariales y es, además, una fórmula para atraer a los mejores, identificar el talento, cultivarlo y potenciar la movilidad internacional.
