Las empresas estaban inmersas en la nueva transformación digital, grandes cambios que implicaban ajustes y adaptaciones a los nuevos tiempos.
Cambios en las perspectivas de los negocios, cambios que están acometiendo muchas organizaciones, así como los desafíos que ha conllevado la pandemia del Covid-19 y que han puesto en jaque al liderazgo empresarial, que ve cómo la necesidad de reinvención del perfil profesional también alcanza a la alta dirección.
No sé si estamos ante la Cuarta Revolución Industrial, pero lo que tengo claro es que 2021 será conocido como el año después de la Covid-19.
Ante este nuevo panorama, la capacidad de comunicación, empatía, visión estratégica, habilidad para analizar datos y manejo de las nuevas tecnologías son algunas de las competencias que piden los especialistas en selección a los aspirantes a un puesto de trabajo.
Sin embargo, estas habilidades son también claves en las posiciones de liderazgo.
Hace unas semanas, en una revista leí un artículo que aseguraba que el hecho de que la inteligencia artificial y la robótica estén cada vez más presentes en muchos lugares de trabajo no significa que las habilidades de liderazgo humano no sean necesarias.
De hecho, se apunta a que dichas competencias serán vitales para el éxito.
Así que, como propósito de este 2021, deberemos trabajar estas habilidades que todo líder deberá desarrollar si quiere seguir liderando y lograr sus objetivos el próximo año.
1.- Capacidad de entender y aplicar ágilmente los cambios
Los líderes deberán ver las nuevas medidas, tendencias y procesos de cambio como una oportunidad para crecer e innovar, y no como una carga.
2.- Inteligencia emocional
Clave para poder percibir, comprender y gestionar las emociones propias y ajenas, es decir, las emociones personales y las de los miembros de los equipos, mejorando así la gestión del capital humano que dirige, y más especialmente en un contexto social y económico tan duro derivado de la Covid-19.
3.- Humildad y confianza
Dos conceptos que son plenamente compatibles.
Hay que buscar un equilibrio entre la confianza en sus propias habilidades y decisiones, y ser humildes acerca de su lugar en la organización, con el fin de impulsar -junto a sus equipos- y tener éxito en las iniciativas puestas en marcha, al tiempo que se hace brillar a toda la fuerza de trabajo.
4.- Gestión de la comunicación
El futuro del trabajo pasa por la creación de organizaciones cada vez más transparentes y colaborativas.
5.- Visión estratégica
Un buen líder del siglo XXI debe saber anticiparse a las tendencias que llegarán a la organización para volver a cambiarlo todo.
“Esto requiere que un líder determine estratégicamente cómo satisfacer las nuevas necesidades de todas las partes interesadas de manera efectiva”, destacan desde Forbes.
6.- Flexibilidad
Es vital para adaptarse a las cambiantes demandas de los trabajadores, las áreas de trabajo y las herramientas en un entorno VUCA.
Lo que funcionó con éxito en el pasado no tiene por qué ser la fórmula para el éxito del mañana.
7.- Pensamiento digital
Los líderes de hoy no solo deberán tener conocimientos técnicos, sino que también necesitarán entender, tener conversaciones y tomar decisiones relacionadas con el uso, aplicación e inversión en tecnología.
8.- Liderazgo efectivo
Es necesario poder escuchar lo que no se dice y ver lo que no es visible.
Especialmente en un entorno con un ecosistema de trabajo diverso, compuesto por profesionales de hasta cinco generaciones, con características culturales muy distintas y un perfil profesional cada vez más heterogéneo.
El liderazgo efectivo también requiere que alguien con experiencia aprecie y aproveche las diferencias que cada individuo aporta al equipo desde sus perspectivas individuales.
Sin lugar a duda, un buen líder deberá mantenerse enfocado en los objetivos de la organización y proporcionar estabilidad a los empleados, incluso cuando la urgencia de los cambios modifique sus prioridades.
Responsable de Comunicación, Marketing y Negocio Digital en Up Spain