Según el último estudio de ManpowerGroup, el mercado del trabajo se polariza y cada vez será más complejo. La empresa, que presentó los resultados del estudio ayer en el World Economic Forum, asegura que los cambios demográficos, la globalización, la revolución tecnológica y el entorno empresarial altamente incierto están desincronizando los mercados laborales. Según este informe, el resultado a nivel global de todo esto es un mercado con alto desempleo junto con puestos de trabajo vacantes, debido a que las habilidades de los trabajadores están fuera de ritmo con las necesidades del negocio, aumentos de productividad con salarios estancados y una recuperación económica con la disminución de ascensos para muchos.
Para Jonas Prising, Presidente y CEO de ManpowerGroup, «ha llegado el momento de la ruptura y de una nueva forma de pensar en relación al mercado laboral, la Human Age 2.0 no tiene que ser una batalla entre el hombre y la máquina. Se están creando nuevos puestos de trabajo, que permiten a muchas personas asumir labores más satisfactorias, pero que también requerirán una formación necesaria para llevarlos a cabo. Aquellos que poseen las habilidades demandadas por el mercado pueden ser más productivas gracias a las nuevas herramientas seguirán viendo cómo aumentan sus salarios. Sin embargo, los que tienen una baja cualificación o habilidades desactualizadas, verá cómo sus salarios se congelan o disminuyen a medida que ese tipo de trabajo se simplifica o es automatizado. En última instancia, el futuro es brillante en oportunidades y crecimiento, pero el aprendizaje y desarrollo continuo de las habilidades del capital humano es esencial».
Por su parte Klaus Schwab, fundador del Foro Económico Mundial, afirmó que «en el futuro, el talento, más de que el capital, representará el factor crítico de la producción. Esto dará lugar a un mercado laboral cada vez más segregado en dos segmentos: ‘baja cualificación/mal pagado’ y ‘altamente cualificado/bien pagado’, que a su vez dará lugar a un aumento de las tensiones sociales».
Así pues, la nueva era de trabajo requerirá un nuevo guión y los empleadores necesitarán agilidad y talento para tener éxito.