Hoy en día, tenemos que hablar de formación permanente, pues es casi una necesidad el aprender algo nuevo todos los días.
Esto es así porque vivimos en un entorno altamente cambiante y cada vez más digitalizado que requiere la adaptación constante de los conocimientos y habilidades.
A pesar de esto, en nuestro país solo 1 de cada 10 adultos participó en formación permanente durante el 2018, según datos recogidos por el Instituto de Estudios Económicos de Eurostat.
Concretamente, España se sitúa cerca de la media europea (11,1%), con un 10,5%.
Sin embargo, aún queda mucho por hacer, tal y como vamos a comprobar a continuación.
Según los datos registrados, por encima de España se sitúa Suecia (29,8%), Finlandia (28,5%), Dinamarca (23,5%), Estonia (19,7%) y Países Bajos (19,1%).
Francia (18,6%), Luxemburgo (18%), Austria (15,1%), Reino Unido (14,6%) Irlanda (12,5%), Eslovenia (11,4%) y Malta (10,8%) también nos superan.
A continuación de España se encuentran Portugal (10,3%), Bélgica, República Checa (8,5% ambos) y Alemania (8,2%).
En la segunda mitad de la tabla se posicionan Chipre, Letonia (6,7% cada uno), Lituania (6,6%), Hungría (6%), Polonia (5,7%) y Grecia (4,5%).
Por último, los países de la UE-28 con menor participación de la población adulta en formación permanente son Eslovaquia (4%), Croacia (2,9%), Bulgaria (2,5%) y Rumanía (0,9%).