La covid-19 ha cambiado la experiencia del trabajador, generalizando el teletrabajo en un gran número de empresas. Es esencial proporcionar a los empleados una serie de herramientas digitales para garantizar la continuidad de sus funciones a distancia.
Sin embargo, es igualmente esencial continuar la experiencia que se tiene en la empresa. Esto es factible por medio de la digitalización de los RRHH con las herramientas adecuadas.
La experiencia del trabajador se crea a partir de todas las interacciones entre un empleado y su organización desde el momento de la incorporación hasta la salida del mismo.
La ambición de los departamentos de personas es que todos los procesos deben maximizar los sentimientos positivos del empleado hacia la compañía.
Esta experiencia debe aspirar también a alcanzar el justo equilibrio entre las misiones del colaborador, el entorno de trabajo y la cultura corporativa.
Para Enrique Escobar, Managing Director Iberia & Latam de Talentia Software, “en estos momentos con un contexto de inestabilidad, la experiencia del trabajador no debe pasar a un segundo plano ni verse afectada por la introducción de herramientas digitales».
«Más bien lo contrario: debemos apoyarnos en la digitalización para mejorar esta experiencia”, prosigue.
En los últimos años, las empresas se han centrado mucho en la experiencia del cliente y, en ocasiones, ha sido en detrimento de la experiencia del trabajador.
Hoy en día, la experiencia del trabajador y del empleado está directamente relacionada con el rendimiento de la empresa.
La gestión de la experiencia del empleado en remoto
Según la empresa de estudios de mercado Markess, el 77% de los departamentos de RRHH se han fijado como primer objetivo reforzar el compromiso de los empleados de la empresa.
Además, el 56% quiere fortalecer el rendimiento general de la compañía y el 42% espera mejorar su atractivo. Estas cifras muestran un vínculo muy importante entre el compromiso de los empleados y el rendimiento general de la empresa.
Con la llegada de la Covid-19 el talento de las organizaciones se pone en riesgo.
Primero, es esencial garantizar la salud de la plantilla y asegurarse de que todas las funciones cruciales para el normal funcionamiento de la empresa están cubiertas. Es por ello que se debe gestionar los equipos a distancia, asegurar un mayor rendimiento y mejorar el engagement.
La experiencia del trabajador es crítica para la organización, puesto que es un factor clave en el rendimiento.
Por ello, se trata de un desafío absoluto, especialmente en tiempos de crisis de la Covid-19, donde mantener una fuerte relación con los empleados es más vital que nunca para las empresas.
El ‘smart working’ es la tónica general, debiéndose instaurar procesos sencillos y digitales que permitan continuar proporcionando una experiencia del trabajador óptima.
La mejora de la vida diaria del empleado en la empresa, facilitando los intercambios y manteniendo una comunicación continua mediante un canal único y directo ayudan a este objetivo.