Recientemente el Instituto Superior de Derecho y Economía (ISDE) celebró su II Fórum, una jornada donde se analizó el desafío que supone la necesidad de transformar las organizaciones para los bufetes de abogados. Entre los asistentes hubo destacados expertos del sector, como Melisa Rojas, directora de RRHH de Simmons & Simmons, quien recientemente fue entrevistada por Francisco García Cabello, fundador y director general de Foro Recursos Humanos, destacó que “debemos ir por delante de las tecnologías disruptivas que no solo afectan al trabajo del abogado sino de su cliente”.
Por su parte, Nuria Martín, directora de RRHH de Cuatrecasas, apuntó que “la tecnología es un driver para ir a formas de trabajo más ágiles y más colaborativas. El talento debe servir para gestionar nuevos espacios, nuevos procesos y nueva cultura”. “La formación continua y el training en la especialización es casi una exigencia para los nuevos abogados. Tener un perfil global no sólo es cuestión de idiomas, tiene que ver con unas actitudes, una cultura y en definitivas con unas skills. El abogado del futuro será esencialmente un consejero transversal”.
Alberto Cabello, presidente de la Agrupación de Jóvenes Abogados de Madrid, también acudió para señalar que “es clave la especialización y la diferenciación. El talento debe asociarse a formación, a networking, a cultivar incansablemente las relaciones humanas y a desarrollar no solamente una competencia sana, sino sobre todo colaboraciones en entre abogados y entre equipos de abogados multidisciplinares. El joven letrado debe ser esencialmente reivindicativo e inconformista”.
Por otro lado, Mónica Torre, directora de RRHH de Up SPAIN, recordó que “hay que desarrollar políticas retributivas, flexibles y contemplar cada día más los beneficios sociales. La empresa para fidelizar, que no es lo mismo que retener, debe escuchar en cada momento las necesidades de promoción del trabajador y ofrecerle incentivos distintos según la etapa de la vida en la que se encuentre. Debemos escuchar y generar el marco para que los profesionales anden su propio camino”.
Finalmente Sancho Peña, socio de Page Executive, incidió en que “el talento no solo se posee, hay que desarrollarlo”. “Cada persona debe decidir lo que está dispuesta a sacrificar de su vida personal y privada. Tiene enorme valor algo que nos parece obvio, que el cliente tiene que percibir que el abogado está no solo para lo bueno sino que también para lo malo, de forma cercana y humana. La faceta humana y psicológica es clave para conectar a una persona con una empresa y organización”.