La diversidad cognitiva es un concepto que ha ganado relevancia en el ámbito de los Recursos Humanos, especialmente en un entorno empresarial cada vez más globalizado y competitivo. Y que se refiere a las diferencias en los estilos de pensamiento, perspectivas, habilidades y enfoques para resolver problemas entre los miembros de un equipo.
La diversidad cognitiva abarca una amplia gama de diferencias individuales que incluyen, pero no se limitan, a la formación académica, la experiencia profesional, las habilidades técnicas y las capacidades de resolución de problemas. A diferencia de otros tipos de diversidad, como la de género o la étnica, se centra en cómo las personas piensan y abordan los desafíos.
Ventajas de la diversidad cognitiva
- Innovación y creatividad: Al reunir diferentes perspectivas y enfoques para resolver problemas tendremos equipos diversos en términos cognitivos, más propensos a generar ideas innovadoras y a desarrollar soluciones únicas que pueden dar a las empresas una ventaja competitiva en el mercado.
- Mejora en la toma de decisiones: La inclusión de múltiples perspectivas en el proceso de toma de decisiones puede conducir a decisiones más informadas y equilibradas. La diversidad cognitiva ayuda a identificar riesgos y oportunidades que podrían pasar desapercibidos en un grupo homogéneo.
- Aumento de la productividad: Equipos con una amplia gama de habilidades pueden abordar tareas complejas de manera más eficiente. La complementariedad de skills permite una mejor asignación de tareas y una mayor eficiencia operativa.
- Adaptabilidad y resiliencia: La diversidad cognitiva también contribuye a la adaptabilidad y resiliencia de una organización. Equipos diversos son más capaces de adaptarse a cambios y de recuperarse de contratiempos debido a la variedad de planteamientos y soluciones disponibles.
Estrategias para fomentar la diversidad cognitiva
- Contratación inclusiva: Implementar políticas de contratación que valoren la diversidad cognitiva es fundamental. Esto incluye buscar candidatos con diferentes antecedentes educativos y experiencias profesionales, así como valorar habilidades no tradicionales.
- Capacitación y desarrollo: Ofrecer programas de capacitación que enseñen a los empleados a valorar y aprovechar las diferentes perspectivas dentro del equipo. Esto puede incluir talleres sobre pensamiento crítico, resolución de problemas y colaboración.
- Cultura organizacional inclusiva: La promoción de un entorno de trabajo inclusivo donde todos los empleados se sientan valorados y escuchados se traduce en una cultura organizacional de mayor calidad y variedad.
- Liderazgo diverso: Los líderes deben ser modelos a seguir en la promoción de la diversidad cognitiva. Esto incluye no solo contratar y promover a individuos diversos, sino también crear un entorno donde las ideas y perspectivas diversas sean bienvenidas y valoradas.
Tomar decisiones gracias a la diversidad cognitiva
Ser un buen líder requiere de una serie de características. Algunas de ellas innatas y otras adquiridas a través de la experiencia o la formación. Pero todas ellas necesarias para saber llevar las riendas de un equipo y obtener los mejores resultados posibles.
Una de esas cualidades es la diversidad cognitiva, la cual podemos trabajar para sacarle el máximo rendimiento e incluso para convertir los obstáculos en catalizadores para decisiones más sólidas y fundamentadas.
Con la diversidad cognitiva se amplía significativamente el espectro de soluciones potenciales. Un líder, con su conjunto único de experiencias, conocimientos y perspectivas, tiene en su mente un cúmulo de ideas que aumenta la probabilidad de encontrar soluciones innovadoras y efectivas, especialmente en situaciones complejas o sin precedentes.
La consecución de planteamientos diferentes ayuda a reducir los sesgos cognitivos que nos pueden llevar a tomar decisiones incorrectas o incompletas. De ahí la importancia de trabajar la obtención de una visión global desde la que analizar y actuar de manera precisa para la reducción de riesgos y el manejo de diferentes situaciones.
El el mundo laboral actual está encaminado hacia la automatización de tareas a través de las nuevas tecnologías. Algo que nos simplifica la vida pero que también puede llevar a la falta de análisis y pensamiento crítico. Cuando las ideas son cuestionadas y examinadas desde múltiples ángulos, se produce un análisis más profundo y riguroso. Un proceso de cuestionamiento y debate constructivo que mejora la calidad de las decisiones.
La diversidad cognitiva no es simplemente una cuestión de inclusión, sino una estrategia fundamental para mejorar la calidad, la innovación y la efectividad de las decisiones organizacionales. Los líderes de Recursos Humanos deben reconocer el valor estratégico de trabajar planteamientos diversos a fin de ganar en efectividad y eficacias desde la toma de decisiones.