Muchas empresas y organizaciones han cambiado sus políticas de movilidad, dejando atrás los modelos únicos que asumen la igualdad de necesidades para los expatriados y sus respectivas familias. Esto es debido a que el enfoque estándar no suele cumplir con las necesidades individuales, mientras que la flexibilidad permite tener en cuenta las prioridades de los trabajadores, y a que los empleados quieren más apoyo.
Desde Crown World Mobility, empresa de soluciones nacionales e internacionales de movilidad laboral, explican que los cinco enfoques más comunes de las políticas flexibles son:
- Núcleo – flex. Política con una serie de provisiones ofrecidas a todos los trabajadores y una serie de provisiones opcionales basadas en un criterio definido (necesidades del trabajador, poderes directivos, etc.).
- Cafetería/A la carta. Política con una serie de provisiones a escoger por la empresa, trabajador o ambos.
- Regional/Geográfica. Política o una serie de provisiones en una política que se aplica a una zona geográfica concreta.
- Por niveles, según la razón de negocio. Conjunto de políticas basadas en razones empresariales (largo plazo, corto plazo, formación, rotación, etc.).
- Por niveles, según la categoría del empleado. Conjunto de políticas basadas en las tareas laborales o el nivel profesional (ejecutivo, directivo, técnico, etc.).
De estos cinco, el núcleo – flex es cada vez más popular. Esto es debido a que permite combinar elementos imprescindibles y elementos opcionales, los cuales pueden ser gestionados de formas diferentes y combinarse en función de un número de factores que la empresa considere relevantes. De este modo, se consigue un programa a medida que atiende a las necesidades empresariales y del trabajador.
Aunque esta mayor flexibilidad añade más complejidad a la gestión administrativa, la existencia de elementos opcionales lleva a muchos directivos a presuponer un ahorro de recursos, aunque hay que tener cuidado pues sin un diseño e implementación correctos de los programas se puede incrementar el gasto general.