No me atribuyo el título original de este artículo semanal. Le doy el mérito a una de las ejecutivas que más he presentado en los últimos años. Me refiero a Amparo Moraleda, quien fuera Presidente de IBM y que actualmente ejerce de Consejera Independiente en varias compañías. Ella y el CEO de Ranstand, Rodrigo Martín, protagonizaron un debate con reflexiones muy interesantes en el entorno de la actitud directiva organizado en el 20 aniversario de la AED en Madrid, en un acto presentado por la periodista Gloria Lomana.
No tuvo desperdicio ninguna de las reflexiones hablando de “El liderazgo y la dirección de personas en la función directiva”. Aquí van algunas… Es importante eliminar los miedos organizacionales, debemos ejercer un liderazgo activo, debemos escuchar permanentemente al cliente, es clave compartir valores y misiones con la organización, se debe dedicar mucho tiempo a la lealtad, cohesión y al equipo, debemos invertir en talento y todas las tareas directivas realizarlas con coraje y determinación… Todas estas conclusiones están muy bien, pero la más repetida fue “la necesidad de comunicar constantemente a los equipos… comunicar y comunicar hasta que nos duela la lengua”.
Y coincido realmente con estas reflexiones. El directivo de nuestro tiempo, además de saber, debe dedicar la mayoría de su tiempo a comunicar, comunicar el plan estratégico, transmitir los pequeños y grandes hitos, comunicar one to one a los miembros de los equipos, analizar y transmitir mensajes coherentes y originales, ser empático y claro, ser correa transmisora del liderazgo, hablar y comunicar con los clientes, y todo, intentando construir una visibilidad corporativa y de marca de la organización de dentro a fuera para que clientes y empleados se sientan orgullosos.
Francisco García Cabello
Fundador y Director del Foro de los Recursos Humanos
