6 de cada 10 empleadores rechaza a los candidatos por sus malas referencias laborales. Así lo revela el último estudio elaborado por la Comunidad Laboral Trabajando.com-Universia.
Para evitar este tipo de problemas, los candidatos deben tenerlas preparadas con antelación, así, cuando asistan a una entrevista y el reclutador les solicite referencias, podrán dar respuesta a preguntas tales como las tareas realizadas, las responsabilidades que tuvimos y logros alcanzados, así como una valoración sobre nuestra forma de trabajar o las capacidades y habilidades que tenemos.
Si estás buscando tu primer empleo también puedes tener preparadas referencias sobre actividades de voluntariado, de tus profesores o instructores, ya que servirán para evidenciar aptitudes y habilidades relevantes como la perseverancia, proactividad y responsabilidad.
“Es recomendable que carta la redacte y firme un ex jefe, responsable de recursos humanos, supervisor o socio de la organización. Además, es importante que estos contactos sean de trabajos recientes, para demostrar que tenemos capacidad para crear buenos lazos con nuestros anteriores empleadores”, explica Javier Caparrós, director general internacional de Trabajando.com y HR-Consulting.
Las referencias laborales nunca se incluye en el currículum vitae dado que en esa fase y nunca incluir esta información en el currículum, así que si nos las solicitan será un indicador de que la entrevista ha ido bien.