Según un estudio elaborado por la Asociación de Mutuas de Accidente de trabajo (AMAT), el absentismo laboral se ha disparado en el último año, coincidiendo con la salida de crisis. Concretamente en 2016 el coste total del absentismo en nuestro país ascendió a casi 76.000 millones de euros, suponiendo para las empresas un coste de 5.500 millones de euros, es decir, un 42,5% más que en 2015. Estas cifras suponen que más de 880.00 trabajadores no acudieron a su puesto ningún día del año durante 2016.
Por otro lado, un estudio de ASEPEYO asegura que el 68% de las bajas tiene una duración inferior a 16 días y que éstas están las relacionadas con las dolencias lumbares (13%), seguidas por las relacionadas con el estrés, los riesgos psicosociales (11%) y la gripe.
A pesar de estas cifras, más del 60% de las empresas españolas sigue sin utilizar herramientas de medición con las que identificar y medir los costes del absentismo laboral. “Hay muchas empresas que desconocen su absentismo laboral, sus causas y el coste asociado al mismo. Las empresas conocen perfectamente sus costes directos e indirectos, pero no cuantifican el absentismo laboral. Conocer el coste y sus causas, permite establecer un plan de medidas concretas y valorar si han sido eficaces o no, es decir, el ROI de las mismas”, afirma Pedro López, Director del Servicio de Prevención Propio de ASPY Prevención.
Para realizar un buen diagnóstico del absentismo laboral y poder llevar a cabo un correcto plan de actuación “el análisis debe incluir el coste del absentismo. Si te dicen que en tu empresa se han perdido 8.000 días al año por bajas laborales, o lo que es lo mismo que 33 trabajadores no acuden nunca a trabajar, es cuando eres realmente consciente. A partir de estos primeros datos podremos tratar un plan de actuación con la ayuda de verdaderos expertos en la materia que aporten conocimientos y experiencias ya que pueden ver ‘cosas’ que nosotros no vemos, sobre todo si se trata de la gestión de los riesgos psicosociales”, concluye Pedro López.