El líder tiene que dirigir las tareas y cometidos del resto de miembros del equipo con un único fin: alcanzar los objetivos fijados. Para lograrlo no solo debe coordinar y organizar bien el trabajo del equipo, es necesario que también tenga en cuenta otros mecanismos para lograr que el correcto funcionamiento de su grupo.
Javier González, CEO y coach en el Instituto Superior Magna Coaching, apunta las siguientes señala 4 capacidades que los líderes pueden poner en práctica para mejorar su liderazgo:
- Autoconocimiento: El líder debe analizar sus competencias, fortalezas y debilidades, así como las de los miembros de su equipo. Solo así podrá fijar y afrontar objetivos realistas y factibles.
- Comunicación activa y empática: Un buen líder debe desarrollar y fomentar canales de comunicación participativos en los que quede patente la escucha activa y la empatía horizontal (entre compañeros de departamento) y vertical (de superior a subordinado y viceversa).
- Ejemplaridad: El líder debe hacer y poner en práctica lo que él mismo indica a los demás. Ser consecuente con lo que se dice es la forma más directa de ganarse el respeto de los compañeros.
- Trabajar el sentimiento de pertenencia y adhesión al grupo: Uno de los objetivos de todo líder es lograr que los miembros del equipo se identifiquen con las costumbres, normas y valores del grupo. Para ello, es imprescindible que el líder fomente una relación de confianza entre los empleados.
Fuente: RRHHpress