El dinamismo de nuestro mercado laboral se sitúa en el 22,8% durante el tercer trimestre del año y alcanza su máximo desde su creación en 2010, y ha aumentado en 18 puntos desde inicios de 2011. Así lo revela el indicador Meta4 IDL, elaborado por Meta4 e investigadores del IRCO para medir el nivel de flexibilidad interna de los empleos ya existentes y estudiar la renovación dentro de las organizaciones, a partir del porcentaje de contratos que ha experimentado algún cambio, al margen de la creación o la destrucción de empleo.
El estudio pone de manifiesto que por cada 100 puestos de empleo desaparecieron 3 y se crearon 5. Así, el número total de nuevas contrataciones y bajas se ha estabilizado entorno al 30% de los puestos de trabajo, de los cuales un 22,8% son consecuencia del dinamismo laboral.
El informe revela también un cambio de tendencia en los trabajadores. Hasta 2012, únicamente los empleados temporales abandonaban de forma voluntaria su puesto de trabajo por percibir un mayor nivel de precariedad en su empleo. Sin embargo, desde 2014, y con motivo de la mejora de las oportunidades laborales, los trabajadores con otro tipo de contratos también empezaron a dejar voluntariamente sus puestos de trabajo, tendencia que alcanzó su máximo histórico este último verano.
Por otro lado, los encargados de calcular este índice destacan que las empresas siguen contratando y prescindiendo de trabajadores, no para cubrir sus necesidades de expansión o reducción de plantilla, sino para renovar y cambiar su Capital Humano.
Según José Ramón Pin Arboledas, profesor de Dirección de Personales en las Organizaciones del IESE del IESE Marta Elvira, “el aumento del IDL, junto con el crecimiento del empleo y el aumento del PIB en la economía, indica que el mercado laboral español es cada vez más dinámico y en ese sentido, saneado”. Para el profesor Pin, la dinámica interna en las empresas (IDL) y externa en el mercado es de fluidez: “Esa realidad interna de las empresas y las expectativas de los empleados indican que la movilidad laboral es un hecho que se acelerará en el mercado de trabajo español. Para los próximos años se puede pronosticar un fenómeno de escasez de oferta de trabajadores cualificados y la necesidad de que las empresas busquen medidas de fidelización de estos empleados a través de subidas salariales, mejoras de condiciones laborales y otras políticas como la promoción, lo que repercutirá en crecimiento del IDL”, subraya el profesor.
Por su parte Carlos Pardo, CEO de Meta4, estima que «los datos aportados por este nuevo IDL confirman la tendencia de revitalización del empleo. Especialmente interesante resulta el incremento de la rotación de aquellos profesionales que teniendo un empleo estable deciden cambiar de empresas. Es un claro síntoma de que las compañías necesitan con urgencia diseñar y aplicar políticas que prevengan la fuga de talento y que de esta forma evite la tremenda pérdida de conocimiento que esto implica».