La Fundación GoodJob ha organizado dentro de la 5ª edición del Foro de Economía de Tres Cantos la mesa redonda “Discapacidad, Empleo y Deporte” para hablar de los retos actuales de la inclusión laboral de personas con discapacidad. Dani Molina, paratriatleta campeón del mundo de acuatlón y subcampeón del mundo de triatlón, y Esther Ramiro, campeona del Europeo B de baloncesto en silla de ruedas con la selección española, contaron sus experiencias personales y profesionales y explicaron cómo se puede lograr el éxito superando las dificultades que se presentan en el camino.
Molina aseguró que “el rival más duro al final es uno mismo”. “Es importantísimo que tu trabajo sea tu pasión”. Por su parte, Esther Ramiro explicó que “las personas con discapacidad cambiamos el entorno en el que trabajamos, la gente rompe mitos y relativiza sus problemas”. “De la noche a la mañana un accidente seccionó mi medula y cambió mi vida. El deporte fue lo que me sacó de mi casa. Y gracias a GoodJob conseguí un empleo”.
Ignacio Polo, del Centro de Estudios sobre el Deporte Inclusivo (CEDI), también participó en la mesa: “Creemos firmemente en el deporte inclusivo y nuestra filosofía es que todos tenemos diferentes capacidades”.
La mesa redonda contó también con los responsables de la Fundación GoodJob hablaron sobre cómo pueden prepararse y entrenarse las personas con discapacidad antes de entrar en un trabajo, así como de los pasos que deben seguir para mantenerse en el mismo.
“La plantilla de una empresa debe ser un fiel reflejo de la pluralidad de la sociedad, con personas con discapacidad”, afirmó César López, Director General de la Fundación GoodJob. “Los retos actuales son la capacitación de las personas con discapacidad, aumentar la población activa, e incentivar la integración laboral en la empresa ordinaria”.
En este sentido, según Verónica Nuñez, responsable de RRHH de la Fundación, “la figura clave del empleo con apoyo de las personas con discapacidad es el preparador laboral. El objetivo final es que la persona camine sola”.
Por último Mercedes Leyún, propietaria de la empresa Papyrum, que emplea a diversas personas con discapacidad a través de un proyecto de integración laboral que desarrolla con la Fundación GoodJob, afirmó que “las personas del enclave laboral son para mí uno más del equipo de la empresa”.