El dinamismo de nuestro mercado laboral se sitúa en el 18,6% durante la primera mitad del año y se estabiliza alrededor de sus niveles máximos tras dos años de crecimiento continuo. Así lo revela el indicador Meta4 IDL, elaborado por Meta4 e investigadores del IRCO para medir el nivel de flexibilidad interna de los empleos ya existentes y estudiar la renovación dentro de las organizaciones, a partir del porcentaje de contratos que ha experimentado algún cambio, al margen de la creación o la destrucción de empleo.
Dado que el Meta4 IDL refleja la flexibilidad interna de las empresas, podemos decir que casi 1 de cada 5 profesionales en España ha experimentado algún cambio interno. Estos cambios pueden referirse a movimientos organizativos relativos a cambios de departamento, jubilaciones, bajas voluntarias y sus reposiciones, cambios de modalidades de contratación,…
Respecto al volumen de nuevos contratos firmados sobre el total de trabajadores, el Meta4 IDL revela que de cada 100 empleados en una empresa, 10 se han incorporado en los tres últimos meses, el nivel máximo alcanzado desde 2010. Concretamente, dos ocupan cargos nuevos, mientras que los ocho restantes sustituyen a trabajadores que han dejado la compañía por diversas razones.
En cuanto a los datos de creación y destrucción de empleo, el informe muestra que por cada 100 puestos, se crearon 4,2 nuevos cargos, mientras simultáneamente desaparecían 2,1, lo que confirma la tendencia hacia la creación de empleo.
Este dinamismo se ha producido debido a un incremento de los contratos temporales, especialmente de aquellos que lo son a tiempo parcial: estos son los responsables de casi el 60% del dinamismo observado, mientras que los contratos de duración determinada a tiempo completo explican el 40% del mismo, lo que deja un escaso margen a la contratación indefinida.
José Ramón Pin Arboledas, economista y profesor del IESE Business School, señala que esta situación puede derivar en una mejora en la eficiencia de las empresas, que favorecería una mayor empleabilidad. “Actualmente, hay más posibilidades para quien esté fuera del mercado laboral, a la vez que disminuye la expectativa de duración de las relaciones profesionales. No obstante, esta mayor flexibilidad puede dar pie a la precariedad como forma de acceso al trabajo”.
Por su parte Carlos Pardo, CEO de Meta4, comenta que “la estabilización del Meta4 IDL nos hace pensar que es posible que se esté gestando un giro en los agentes que provocan el dinamismo. Hasta ahora, los cambios en el IDL provenían principalmente de la necesidad de flexibilización de las plantillas por parte de las empresas. Creemos que en un futuro próximo, es posible que estos movimientos se deban a decisiones de cambio de empleo tomadas por los empleados, en busca de mejores condiciones laborales. Así pues, es necesario que las compañías comiencen a replantearse sus políticas de retención y captación de talento, para evitar perder sus activos más valiosos a causa de la activación del mercado laboral”.
